El Perfume: historia de un asesino

Que la historia de El Perfume era buena era algo que ya sabiamos, los que en algún momento leimos el libro... leimos el libro y nos gusto, claro. Pero que se pudiera pensar en hacer la película de esta novela del alemán Patrick Süskind era otra cosa.
Obviando el flaco favor que le hace el subtítulo a la película (historia de un asesino? que coño! es la historia de un perfume!!! DEL PERFUME!!! que mate a gente para conseguirlo es absolutamente futil, sobretodo a ojos del protagonista), sigo... hacer la película de una novela cuya esencia (y nunca mejor dicho) se basa en el recuerdo, la imaginación y el olor, se me hace francamente difícil.

Cuando leemos, imaginamos, creamos, a partir de recuerdos, las experiencias de aquello que leemos y, sin embargo, cuando vemos una película, nuestra imaginación cierra por vacaciones y los únicos sentidos que tenemos en cuenta son la vista y el oido... nada de olfato, el sentido de la memoria por excelencia. Por tanto, captar la esencia (ya estamos otra vez) de la novela no parecía tarea fácil.

Sin embargo, Tom Tykwer, el director, hace un extraordinario trabajo, sobretodo con la puesta en escena, hay que mencionar que está rodada en Barcelona. La dirección es vigorosa, visceral y, me atrevería a decir, cruel... y todo ello sirve para que podamos entender mejor al personaje principal: Jean-Baptiste Grenouille. Este personaje está interpretado por Ben Wishaw, un actor prácticamente desconocido, pero del que ya sabemos algo de él en este foro, ya que forma parte del elenco de Layer Cake. Su interpretación es magistral, y gracias a él podemos entender la absoluta falta de código moral y de empatía que definen a Jean-Baptiste. Un ser con un don fabuloso, que vive por y para los instintos, y que por lo tanto se debe a ellos y libera todo su afán por conseguir lo que quiere.

Mientras veía la película pensé en algo que no había pensado viendo la novela. Estamos, y permitid que vuele mi alma friky, ante la historia de un superheroe, un mutante cuyo gen-X ha hecho que su olfato pueda reconocer, dividir y racionalizar cada uno de los olores que pasan por su pituitaria.. un ser extraordinario, que debido a su rareza, vive en soledad, apartado de todo aquello que lo podría haber hecho medianamente humano, y convirtiéndolo en una bestia que no conoce el bien o el mal, sólo sabe lo que quiere y cuando sepa como conseguirlo no dudará en acabar su trabajo.

Una historia, como ya sabiamos, muy buena; una película muy atractiva, y altamente recomendable... ah! los fetichistas que se pirren por las pelirrojas tienen un par de añadidos para ver la película



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SithWolf